A continuación, el coordinador de la Zona Catalana – Balear, Jordi Aragunde describió la situación actual de los puertos de su Zona.

En primer lugar, el Puerto de Barcelona, en el que se realizan todo tipo de tráficos, alcanzando los 15-18 turnos al mes, ha registrado un nivel de actividad más bajo que en años anteriores debido a la caída que se está produciendo en el trasbordo. En estos últimos años se ha trabajado en la flexibilidad horaria y en la adaptación de la plantilla a las necesidades del tráfico. En estos momentos se encuentra en proceso de negociación del convenio colectivo para adaptarlo al IV Acuerdo y ampliar su vigencia hasta 2020.

El Puerto de Tarragona ha sufrido una gran caída de tráficos durante 2013, que parece mostrar una cierta mejoría en los primeros meses de 2014, realizándose una media mensual de 14-16 jornales. El objetivo principal es estabilizar la plantilla tras las últimas jubilaciones. Aragunde también quiso destacar el papel relevante de este puerto en la Comisión de Graneles.

En el Puerto de Castellón se está realizando una media de 24-25 turnos al mes. Las principales mercancías que registra este puerto son el granel y los contenedores. Su objetivo es conseguir ingresos en los próximos años, siempre que se consolide el aumento de tráficos.

El Puerto de Alcudia está realizando en torno a 22-24 jornales al mes, con una gran movilidad geográfica con el Puerto de Palma de Mallorca, y la tendencia es creciente de cara a los meses de verano. Se trata de un puerto principalmente granelero.

En el Puerto de Ibiza, la media de jornales se encuentra en 15-17 turnos mensuales, llegando a alcanzar los 20-22 en los meses de verano gracias al tráfico de rodantes. El convenio colectivo está vigente hasta 2015, por lo que ya se está trabajando en su renovación y adaptación al IV Acuerdo. Además, también se deben destacar los trabajos orientados a conseguir que estibadores de Ibiza trabajen en el Puerto de La Savina, en Formentera.

En el Puerto de Mahón se registra una media de 20-21 jornales al mes, mejorando la contratación en los meses de verano, también gracias al tráfico de rodantes. Los principales objetivos son consolidar la presencia de estibadores en el Puerto de Ciudadela y el blindaje del tráfico ro-pax ante el intrusismo.

En el Puerto de Palma de Mallorca se realizan unos 16-18 turnos al mes de media, incrementando en los meses de verano por el tráfico de rodantes. El convenio colectivo se prorroga anualmente, pero en estos momentos está en vías de negociación para adaptarlo al IV Acuerdo Marco. Además, se realiza movilidad geográfica entre los puertos de Palamós, San Carles de la Rápita y Vilanova i la Geltrú, alcanzándose una media de 17, 12 y 6-7 turnos mensuales respectivamente.

En el Puerto de Palamós, el principal reto es atraer nuevas líneas de madera y pasta de papel que aumenten el volumen de tráficos. En el Puerto de San Carles, el objetivo prioritario es negociar el convenio colectivo para adaptarlo al IV Acuerdo, y que sirva de base para una nueva legislación autonómica. Por último, en Vilanova, donde se prevé pérdida de actividad, especialmente de productos siderúrgicos, el objetivo es diseñar junto con patronal y administración, un plan de viabilidad para captar nuevos tráficos y garantizar el mantenimiento de la plantilla.

Para finalizar su intervención, Jordi Aragunde manifestó su intención de abandonar la coordinación de la Zona después de siete años de trabajo. “Continúo en activo, pero quiero dar un pasito al lado y centrarme en el trabajo con los compañeros de Barcelona. Para mí ha sido un privilegio, he intentado hacerlo con la máxima pasión y me voy con la sensación de haberse hecho bien”, concluyó Aragunde.