Tras los acuerdos alcanzados en julio, en los que se garantizaba el mantenimiento del empleo en el sector a cambio de reducciones salariales y reajustes en la organización del trabajo para mejorar la competitividad de los puertos, comienza una última etapa de negociación entre los sindicatos y la patronal.

Durante el verano se suceden reuniones en los puertos para analizar la situación concreta de los distintos enclaves relativa al dimensionamiento de las plantillas y a otros aspectos ligados a la productividad y en septiembre se retoman los contactos y las negociaciones de todos los aspectos de ámbito general correspondientes al futuro V Acuerdo Marco.

Ha habido intercambios de documentación sobre la que se está trabajando. Aunque las posturas aún están alejadas, la negociación avanza bajo el firme propósito de las partes de alcanzar un acuerdo que de estabilidad a los puertos durante los próximos años.

Sin embargo, los trabajadores y la patronal están a la espera de la aprobación por el Ministerio de Fomento del texto definitivo del decreto ley del sector para poder sellar un acuerdo definitivo. Hay cuestiones del nuevo reglamento que condicionan la negociación como son las ayudas a la prejubilación, aspectos del proceso de formación o la organización de los nuevos centros portuarios de empleo.

Tanto los sindicatos como la patronal solicitaron que el decreto ley se tramitase por la vía de urgencia para poder cerrar el conflicto, pero después de cuatro meses no se ha recibido nada del Gobierno. El secretario de Estado de Infraestructuras Julio Gómez – Pomar ha manifestado públicamente que la aprobación del Real Decreto todavía necesita dar algunos pasos más, pero se está trabajando en ello.