“Ha llegado el momento de dar el siguiente paso. A los trabajadores y las empresas nos toca ahora reforzar con argumentos técnicos, e incluso trabajar en el desarrollo de los mismos, la propuesta de modificación de Ley presentada al Gobierno, como respuesta a los requerimientos del Tribunal de Luxemburgo. Hay que seguir defendiendo que la única salida a este cuestionamiento que nació en Europa es el consenso. Tenemos un acuerdo, tenemos un proyecto conjunto, las bases están sentadas. Ahora queda trabajar entre nosotros, patronal y trabajadores junto con las instituciones, para desarrollar toda esa propuesta para que, cuando tengamos nuevo Gobierno, podamos presentar un texto sólido que defienda los intereses del sector, con el que nos sintamos identificados y representados, que satisfaga las demandas europeas y se legisle en consecuencia. La indefinición solo genera inestabilidad, el mayor enemigo de los puertos, una de las industrias más prósperas del país”.

Así hablaba Antolín Goya en nuestra 40ª Asamblea General, celebrada en Gijón, un puerto que se volcó con Coordinadora. Desde nuestros propios compañeros hasta la Autoridad Portuaria ejercieron de anfitriones inmejorables, nos dotaron del marco ideal para la celebración de un encuentro que quedará en el recuerdo como uno de los más productivos de los que hemos celebrado, tanto por la cantidad de asistentes como por la calidad de las intervenciones. En ellas demostramos que somos una organización madura y bien imbricada, preparada para hacer frente a los momentos difíciles que nos acechan con unidad, valentía, cabeza y músculo.