Estos últimos meses el sector de la estiba se ha visto envuelto en un grave conflicto por culpa de la insensatez del Gobierno y su solución autoritaria a la sentencia del TJUE.

Escudándose en mentiras, como la inminencia de la multa y la imposibilidad de negociación ya que, según el gobierno, la solución estaba impuesta desde Europa, ha ido boicoteando cada propuesta que sindicatos y patronal realizaban para resolver la situación.

Tras la aprobación de este segundo real decreto ley, que no es más que un expediente de extinción de empleo encubierto para más de 6.000 trabajadores y precariza las condiciones laborales de la profesión, empieza una segunda fase en la lucha de Coordinadora.

Comienza una nueva etapa del conflicto en la que más que nunca, se verá reforzada la unidad y lealtad de los trabajadores portuarios.